Mis Finanzas

5 errores que seguro cometes al usar la tarjeta de crédito

Utilizar de manera errónea los plásticos tiene como consecuencia un sobreendeudamiento. Por eso es importante conocer cuáles son las fallas más comunes.

Una de las causa principales de endeudamiento entre los mexicanos es el mal uso de las tarjetas de crédito. El monto promedio de deuda de quienes hicieron mal uso de sus plásticos, se ubica arriba de la media nacional, aseguró Kathy Quintero, experta en finanzas personales.

La especialista precisó que, de acuerdo con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), actualmente hay más de 25 millones de plásticos en circulación, lo que representa un aumento del 4 por ciento con respecto a las cifras de 2016. Además, señaló que al cierre del año pasado el saldo total de las tarjetas fue de 386 mil millones de pesos, convirtiéndolas en el producto de mayor monto en toda la cartera de crédito de consumo.

Sin embargo, destacó que el entusiasmo en la aceptación de esta forma de pago no se ha visto acompañado de una mejor administración monetaria. Según la misma fuente, el Índice de Morosidad (IMOR) de los plásticos se situó en 5.32 puntos porcentuales a finales de 2017. Lo que representa un incremento en los de créditos no liquidados a la fecha de vencimiento, frente a las cifras de 2016.

Por lo anterior, la experta en finanzas personales enumera los cinco errores más comunes entre las personas que utilizan de manera errónea su tarjeta de crédito, motivos que pueden derivar en un problema de sobreendeudamiento.

1. Usar el plástico como un ingreso extra

Esto se presenta entre quienes olvidan que las tarjetas son un instrumento de pago en la que se presta cierta cantidad de dinero bajo la promesa de que se devolverá posteriormente. Al no tener esto en cuenta, muchas personas integran la línea de crédito a sus ingresos regulares, lo que afecta la percepción real de su capacidad de pago.

2. Pagar una tarjeta con la otra

Sacar un clavo con otro clavo no es algo aconsejable en las relaciones ni en las finanzas personales. Lamentablemente, muchos cuentahabientes procuran resolver un problema de endeudamiento pagando con otro crédito revolvente. Esta situación podría generar un efecto bola de nieve cuyo resultado sería una deuda aún más grande que la primera.

3. Adquirir más tarjetas de las que se pueden pagar

Identificar nuestros hábitos de consumo, así como los ingresos con los que contamos, nos permite dimensionar cuáles son los límites de nuestras condiciones económicas. Sin embargo, hemos tenido clientes que deciden sacar tarjetas porque se les hizo fácil hacerlo, sin contar con la disciplina ni la capacidad financiera para mantenerlas bajo control.

4. No saber cómo funciona una tarjeta de crédito

La educación financiera en cuanto al uso de los plásticos incluye desde poder leer un estado de cuenta hasta entender qué significan conceptos como el CAT y sus implicaciones en el costo del crédito. No obstante, la mayoría de los tarjetahabientes no adquieren una tarjeta como resultado de una decisión meditada, consciente y dirigida a obtener un mejor rendimiento de sus recursos.

5. Carecer de un presupuesto

No saber cuánto se gana y en qué se gasta es un mal hábito que afecta todos los aspectos de las finanzas personales. Esta situación podría agravarse cuando se dispone de una tarjeta, ya que si no se tiene una buena administración del dinero propio, es probable que la situación se agrave cuando se adquiere un crédito.

"Es común que las personas no dimensionen el tamaño del problema de endeudamiento sino hasta que ya es demasiado tarde", concluyó la especialista en finanzas personales.

También lee: